En Air Horizont, uno de nuestros valores fundamentales es la experiencia y calidad que ofrecemos en cada uno de nuestros vuelos chárter. Detrás de esta dedicación y profesonalidad se encuentran personas como Manuel Salhi, cofundador y director de operaciones de nuestra compañía, quien ha estado al mando de la compañía desde nuestros primeros días. Manuel no solo supervisa las operaciones diarias, sino que también sigue volando como piloto, lo que le da una perspectiva única sobre los desafíos y éxitos de dirigir una aerolínea.

En esta entrevista, Manuel nos cuenta sobre la historia de la aviación y cómo Air Horizont se ha convertido en una referencia en el sector de los vuelos chárter, adaptándose a las demandas del mercado y manteniendo los más altos estándares de seguridad y servicio.

Los inicios de Air Horizont

«Hola, soy Manuel Salhi, junto con Juan Luis Díez, fundador de Air Horizont. Soy el director de operaciones y también piloto en esta compañía«, nos dice Manuel al comenzar la entrevista. Su pasión por la aviación es evidente desde el primer momento, y su papel no es solo administrativo; también está involucrado en las operaciones diarias, algo que lo distingue como uno de los líderes de nuestra aerolínea.

La misión de Air Horizont comenzó con una visión clara: ofrecer vuelos chárter de calidad que pudieran adaptarse a las necesidades específicas de cada cliente, ya sea en el ámbito deportivo, empresarial o turístico. Desde su fundación, Air Horizont ha ido creciendo y consolidándose en el mercado, especialmente en destinos europeos.

La historia detrás de las tripulaciones de cabina

Manuel nos llevó a una interesante lección de historia sobre el origen de las tripulaciones de cabina, un aspecto crucial en la operación de cualquier vuelo comercial. «La historia de las tripulaciones de cabina comenzó durante la Segunda Guerra Mundial, cuando los aviones eran utilizados para bombardear, transportar materiales, personas y heridos», nos cuenta.

Durante la guerra, las tripulaciones de cabina no solo servían a los pasajeros, sino que jugaban un papel crucial en la seguridad de todos a bordo. «Los aviones tenían una dotación de enfermeras encargadas de ocuparse de los heridos, y cuando no había heridos, estas enfermeras servían café o, lo más importante, informaban a la tripulación de lo que estaba ocurriendo en la parte trasera del avión», añade Manuel. De esta manera, se garantizaba que los pilotos estuvieran al tanto de todo lo que sucedía, algo que sigue siendo clave hoy en día.

La importancia de las tripulaciones de cabina hoy

«Hoy sigue siendo lo mismo», señala Manuel. «Después de la Segunda Guerra Mundial, esas tripulaciones se trasladaron a la aviación civil, y su papel sigue siendo crucial». Las tripulaciones de cabina no solo son los rostros amables que dan la bienvenida a bordo, sino que son los ojos y las manos de los pilotos en la parte trasera del avión. Manuel destaca la importancia de contar con un equipo altamente capacitado que pueda resolver cualquier situación que se presente durante el vuelo, desde emergencias hasta garantizar el confort de los pasajeros.

En Air Horizont, nos enorgullecemos de contar con tripulaciones que no solo tienen una gran experiencia, sino también una dedicación al servicio al cliente. Nuestro enfoque en la seguridad y el bienestar de los pasajeros es una prioridad en cada vuelo.

La excelencia en los vuelos chárter

En los últimos años, Air Horizont se ha especializado en vuelos chárter, un servicio que ofrece una flexibilidad única en comparación con los vuelos regulares. Manuel explica que uno de los aspectos más destacados de los vuelos chárter es la capacidad de personalizar cada vuelo según las necesidades del cliente. «Ofrecemos vuelos para equipos deportivos, grupos de música, empresas y turistas, cada uno con sus propias particularidades y demandas», comenta.

Esta capacidad de adaptación es lo que ha permitido a Air Horizont destacarse en el mercado europeo, y la experiencia de Manuel como piloto y director de operaciones garantiza que cada vuelo cumpla con los más altos estándares de calidad y seguridad. «Sabemos que cada cliente es diferente, y nos aseguramos de que cada uno de nuestros vuelos sea una experiencia única y personalizada», añade.

Compromiso con la seguridad y la calidad

Manuel también habló sobre la importancia de la seguridad en cada operación. «Para nosotros, la seguridad no es negociable», enfatiza. Cada miembro del equipo de Air Horizont, desde los pilotos hasta las tripulaciones de cabina, pasa por rigurosos entrenamientos para estar preparados ante cualquier eventualidad. «Nos aseguramos de que nuestros aviones estén siempre en las mejores condiciones, y trabajamos en estrecha colaboración con nuestros clientes para cumplir con todas sus expectativas».

Además, Manuel subraya el espíritu de equipo que se vive en Air Horizont. «Aquí todos trabajamos como una familia. Desde los técnicos de mantenimiento hasta la tripulación, todos estamos comprometidos en hacer que cada vuelo sea seguro, cómodo y puntual». Este enfoque colaborativo es lo que ha permitido a Air Horizont ganar la confianza de sus clientes y continuar expandiendo su actividad en países de toda Europa.

Mirando hacia el futuro

Cuando le preguntamos a Manuel sobre el futuro de Air Horizont, su respuesta fue clara: «Queremos seguir creciendo y mejorando. Nuestro objetivo es seguir siendo líderes en el mercado de vuelos chárter y mantener nuestra reputación de excelencia en el servicio».

Con más de una década de experiencia en el sector, Manuel y todo el equipo de Air Horizont están comprometidos en ofrecer un servicio que combine calidad, seguridad y flexibilidad, asegurándose de que cada cliente reciba la mejor experiencia posible en cada vuelo.

Air Horizont sigue mirando hacia el futuro con optimismo, confiando en la experiencia y liderazgo de personas como Manuel Salhi, que con su pasión por la aviación y su dedicación al servicio, continúan haciendo de nuestra compañía una referencia en el sector de los vuelos chárter.